La situación laboral de los migrantes en Chiapas: desconfianza, desregularización y oportunidades
Empresarios y legisladores coinciden en la necesidad de generar condiciones de empleo dignas, pero la desconfianza y la falta de regularización son obstáculos clave
En Chiapas, los migrantes enfrentan serias dificultades para encontrar empleo, un problema que se ha visto reflejado tanto en testimonios de legisladores como en empresarios locales. Mientras la crisis migratoria crece, los esfuerzos por integrar a los migrantes en el mercado laboral siguen siendo insuficientes, revelando una realidad compleja en el estado.
Rechazo laboral a los migrantes
Alejandra Gómez Mendoza, diputada local de Morena y miembro de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables e Inclusión del Congreso del Estado, ha sido testigo de cómo los migrantes son rechazados en diversas oportunidades laborales. “En Tapachula, vi cómo mucha gente extranjera llegaba a una empresa buscando trabajo y les decían ‘solo mexicanos’. Fue muy doloroso para mí”, afirmó Gómez Mendoza. La legisladora lamentó que, a pesar de la apertura de fronteras impulsada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, no se hayan generado suficientes opciones de empleo para los migrantes.
Gómez Mendoza subrayó la importancia de fortalecer las instituciones en el estado para garantizar que el Instituto Nacional de Migración (INM) apoye a los migrantes en su proceso de regularización. Además, señaló la necesidad de aprovechar los recursos del sector turístico para fomentar el empleo y evitar que los chiapanecos, así como los migrantes, se vean obligados a abandonar la región en busca de mejores condiciones.
La diputada también cuestionó la construcción de muros como solución al problema migratorio, abogando en cambio por crear acuerdos y alianzas entre los países expulsadores y receptores de migrantes. “No se necesitan muros, sino puentes para generar condiciones laborales que permitan la integración de los migrantes”, destacó.
Desconfianza en el sector empresarial
Por otro lado, la opinión del sector empresarial sobre la contratación de migrantes en Chiapas también es crítica. Francisco Lazos Morales, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA), expresó la dificultad de las empresas para contratar a migrantes, especialmente cuando se encuentran en una situación indocumentada. “El extranjero no tiene papeles en regla, vienen indocumentados y eso los hace más vulnerables”, dijo Lazos Morales, subrayando la desconfianza que genera la contratación de migrantes en las empresas locales.
Lazos Morales reconoció que, aunque las empresas están dispuestas a ayudar a los migrantes, la falta de referencias y la desconfianza sobre su situación legal hacen que las contrataciones sean limitadas. Además, expresó su preocupación por el aumento de la migración a Chiapas debido a las políticas del gobierno de Donald Trump, lo que podría generar más presión sobre un mercado laboral ya colapsado.
El reto de la integración laboral
Ambos puntos de vista, tanto el de la legisladora como el de los empresarios, coinciden en la necesidad de mejorar la situación laboral para los migrantes, aunque desde diferentes perspectivas. Para Gómez Mendoza, la clave está en un mayor esfuerzo por parte de las autoridades para crear condiciones laborales que permitan a los migrantes integrarse y aprovechar su mano de obra en sectores como el turístico. Por su parte, Lazos Morales resalta la necesidad de que los migrantes cuenten con documentos en regla para generar mayor confianza en el sector empresarial.
Lo cierto es que, mientras las caravanas de migrantes siguen llegando a Chiapas y los migrantes continúan buscando una vida mejor, el estado se enfrenta a un desafío significativo: encontrar una solución que equilibre los intereses de los migrantes, la población local y las empresas, sin generar más desconfianza ni división.
El futuro de los migrantes en Chiapas dependerá de una cooperación más estrecha entre autoridades, empresas y comunidades para asegurar que los migrantes tengan acceso a trabajos dignos y a condiciones de vida que les permitan construir un futuro estable en la región.