México y EU “tenemos que ser más ambiciosos ante el problema del fentanilo”: Todd Robinson
“Puede que Estados Unidos y México sean el epicentro del gran problema del fentanilo, pero puede que no sea así para siempre y como así somos capaces de establecer un modelo sobre cómo abordar esta urgente amenaza también podremos ampliar los otros países y evitar su devastador impacto. La amenaza del fentanilo nos desafía a adaptar una nueva perspectiva, aprovechar nuevos recursos y aportar nuevas ideas”, destacó este miércoles el encargado de la política antidrogas del Departamento de Estado de Estados Unidos, Todd Robinson, de visita oficial en México y quien participó en la Conferencia de Drogas Sintéticas en Estados Unidos y México, y en el que también participaron el embajador estadounidense en México, Ken Salazar y la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
El funcionario estadounidense subrayó que como unidad ambos gobiernos “tenemos que pensar en grande, tenemos que ser más ambiciosos” para enfrentar este problema, que causó en 2022 más de 100 mil muertes en Estados Unidos.
En medio de la tensión que hay entre ambos países por causa de este opioide, Todd Robinson subrayó que “estamos reunidos hoy en medio de un cambio en el arquetipo del suministro de drogas. Aunque la era de las drogas de origen vegetal como la cocaína no ha terminado, la producción de drogas sintéticas va en aumento”.
DESAFÍO
En el mismo tenor, consideró que es un enorme desafío luchar contra el tráfico y la producción de fentanilo, ya que se produce con químicos fáciles de ocultar, que son potentes en dosis pequeñas y que incluso se pueden comprar y vender en redes sociales.
Sobre los decesos que ha provocado el consumo de esta droga sintética, el funcionario de EU dijo que por parte de Washington el objetivo es reducir el número de muertes en un 13 por ciento para el año 2025.
Para lograr este objetivo, el encargado de la política antidrogas del Departamento de Estado de EU recordó que en días pasados se acordó por ambos gobiernos intensificar esfuerzos para perseguir a los narcotraficantes y desmantelar redes criminales, algo para lo que, dijo, el plan de acción del Entendimiento Bicentenario busca frenar la inseguridad en la región.